El perfil del usuario medio adepto a descargar apps de todo tipo es un hombre de entre 25 y 40 años, de clase media, urbano, que posee un promedio de 20 apps en su Smartphone y las utiliza más de una vez al día. Para que gusten, éstas deben ser fáciles de usar y útiles para el potencial consumidor.
Dada su popularidad, los desarrolladores han optado por crear las más inverosímiles aplicaciones. Pero para que puedas crear la tuya propia y sacar un rédito económico con su venta, te presentamos los 10 errores que debes evitar en el proceso de desarrollo de las aplicaciones, según especificaciones publicadas en un artículo del portal Lavanguardia.com.
Lo que ofrece al usuario una web es diferente a lo que ofrece una app. Por esto, procura no replicar en tu app lo que ofreces en el sitio ya que son productos distintos.
Previo a su creación, debes pensar su diseño, nombre y concepto. Luego, fíjate en las tiendas si existen similares para no ser una copia de alguna ya existente.
No debes perder de vista las ventajas del dispositivo a través del cual usarás la app tanto desde el punto de vista del software como del hardware.
Los intereses, necesidades y preferencias de los consumidores es lo más importante, más allá de tus gustos particulares.
El proceso de creación debe darse a su debido tiempo. Por esto, no debes avanzar si no estás 100% seguro de que la primera versión resulta.
Cualquier funcionalidad de la app que sea tedioso no resultará. No olvides que los usuarios no tienen demasiada paciencia.
El diseño de cualquier aplicación debe ser uniforme, su uso intuitivo y sus íconos también.
Si las mismas no tienen un propósito real, déjalas de lado.
En toda aplicación deben figurar las funciones “Comentar”, “Me gusta” o “Compartir”. Además, debe garantizar al usuario que podrá hacer cualquier cosa que sea de su interés.
10. Olvidar las acciones de marketing
Es vital propiciar acciones de marketing para vender nuestro producto una vez que lo hayamos creado.