Un estudio realizado por el Harvard School of Public Health de la Universidad de Harvard demostró que los consumidores de vino con presión alta tienen 30% menos riesgo de sufrir un ataque al corazón y, por otra parte, otra investigación de la VU University Medical Center en Ámsterdam comprobó que también tienen 30% menos de riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Sucede que aunque el consumo en demasía no es adecuado, beber moderadamente la bebida puede ser beneficioso para tu salud. Para saber al respecto, presta atención a los siguientes 4 beneficios del vino, consignados en un artículo del portal Muyinteresante.es.
Más de 70 estudios científicos han probado que el consumo moderado o leve del vino mejora la actividad mental. Los expertos aseguran que se debe al poder de la bebida para reducir la inflamación, impedir el endurecimiento de las arterias e inhibir la coagulación. Así se dio cuenta en un análisis difundida en el Acta Neurologica Scandinavica.
Científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts aseguran que el vino activa el gen SIRT1 e impide que se formen nuevas células de grasa. A su vez, otra investigación comprobó que su consumo moderado reduce la obesidad y sobrepeso en la vejez. Lo ideal es consumir 40 gramos por día.
Así lo afirma una investigación difundida en la revista FASEB Journal. Para tal afirmación hicieron experimentos con ratas aseguran que es posible revertir los perjuicios de una vida sin ejercicio gracias al resveratrol de la uva.
Estudios de la Universidad de Pavia probaron que tratar las infecciones en encías a través del vino es beneficioso dado que la bebida frena el crecimiento de estreptococos en la boca que generan caries, gingivitis y dolor en la garganta.