5 maneras de saber si tu idea puede convertirse en un negocio
Seguramente hubo muchas ideas que piensas que podrían triunfar como negocio, pero ¿cómo saberlo con algo más de certeza? Te acercamos 5 maneras para determinarlo.
La creatividad nos lleva a diferentes lugares y nos brinda ideas más o menos alocadas. Sin embargo, como emprendedor sabes que hay ideas que no son viables o que no podrían triunfar en el mundo de los negocios, y otras puede que no estés tan seguro. Entonces, ¿cómo puedes determinar con mayor certeza el potencial de tu idea? Toma nota de las siguientes 5 maneras para averiguarlo:
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1. ¿Tu idea resuelve un problema?
Las ideas verdaderamente novedosas son las que resuelven la vida, haciendo la vida más sencilla y cómoda, eficiente o económica. Tal vez al principio tú seas tu único usuario, sostiene Jessica Livingston, socia de Y Combinator, compañía que ha financiado más de 700 startups, por lo que tal vez estés creando algo para resolver un problema que debes enfrentar seguido. Pero seguramente si tú lo has notado, otros también.
2. Es un negocio a largo plazo
Si no crees que puedas invertir el tiempo y energía para desarrollar tu idea, no lo hagas. Livinsgton explica que esto ocurre con frecuencia, que cuando un negocio no crece acorde a las expectativas de su dueño, éstos explican que el proyecto ya no les apasiona y que no quieren seguir con ello.
Los emprendedores deben lidiar con muchos problemas y personas que si no tienen la pasión y el amor por su empresa, seguramente se darán por vencidos y fracasarán.
3. Tu producto es popular
Otros necesitan estar tan emocionados con el producto como tú. ¿Tienes un pequeño número de usuarios que aman tu producto? Eso en general es una buena señal de que has dado con algo exitoso y que necesitas expandir, sostiene Livingston.
Prueba la idea y muestra prototipos a amigos, familiares y potenciales consumidores, descubriendo qué tan grande es el mercado.
4. ¿Lo has mantenido sencillo y has respondido a las críticas?
Agregar constantemente características y funcionalidades a los productos para hacerlos más atractivos no es una buena idea. Sin embargo, al tomar perspectiva puedes evitar muchos problemas de planeamiento y gastos, ya que tal vez has hecho demasiado del producto y ya no gusta.
Livingston aconseja mantenerlo sencillo, lanzarlo rápido al mercado y obtener las críticas de los consumidores, porque considera que nada es mejor que lanzar y comprender cómo las personas utilizan tu producto.
5. ¿El momento es el correcto?
¿Está preparado el mercado para ti? Muchas veces las ideas han sido probadas antes y sin éxito. Luego resurgen y funcionan, sostiene la ejecutiva. Si una idea previa no te deja en paz, descubre cómo el mundo es diferente hoy con respecto a cuándo la presentaste en primer momento.
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