"50 sombras de Grey" promueve la violencia de género
Un reciente estudio ha comprobado que el best seller internacional de E.L. James fomenta la violencia hacia la mujer
“50 sombras de Grey” es una de las novelas más aclamadas de los últimos tiempos. Desde su publicación en 2011, y la publicación de sus dos secuelas “50 sombras más oscuras” y “50 sombras liberadas” en 2012, la trilogía ha alcanzado las 70 millones de copias en el mundo y ha sido traducida en más de 50 idiomas. Sin embargo, este célebre romance erótico que narra la historia del romance entre la joven Anastasia “Ana” Steele de 22 años y el empresario Christian Grey, de 28, promueve la violencia contra las mujeres según apunta el estudio realizado por la Universidad Estatal de Ohio, Estados Unidos.
De acuerdo al portal montevideo.com.uy, la investigación publicada en el Journal of Women's Health sostiene que el abuso emocional y sexual, así como los daños que sufre Anastasia Steele, el personaje principal de la trama, es el centro de la novela. Si bien la salud de un 25% de estas mujeres es perpetrada por sus parejas, es la aceptación de este tipo de violencia a través de novelas y filmes la que hace que se normalice la noción del abuso, indica el estudio.
¿Cómo realizaron el análisis de Cincuenta sombras?
La responsable del equipo de trabajo, Ana Bonomi, junto a sus colaboradoras Lauren E. Altenburger y Nicole L. Walton, leyó la novela que se cataloga como “romántica” y “erótica” y escribió síntesis de los capítulos para poder reconocer las temáticas tratadas en la obra.
Partieron de la definición de “violencia de pareja íntima” utilizada por los Centros para Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU que la define en base al abuso emocional a través de la intimidación y las amenazas verbales, el aislamiento, la vigilancia y humillación. Por su parte, definen la “violencia sexual” como toda actividad obligada, contra la voluntad de la persona, a partir del uso de alcohol, drogas o intimidación.
Comparando esta definición con las situaciones que se producen a lo largo de la novela, los investigadores descubrieron actitudes y reacciones en común entre la protagonista y las mujeres que han sufrido instancias reales de violencia. De acuerdo con Bonomi, la historia ronda estándares peligrosos de abuso y la disfraza como “romántica” o “erótica”. Explica que no era necesario incluir el abuso para lograr erotismo.
El proceso de pérdida de la identidad, de modificar el comportamiento para adaptarse a la personalidad dominante y la sensación de amenaza constante que siente la protagonista son todas actitudes típicas de quien sufre violencia.
Su comportamiento empieza a adaptarse a los patrones de abuso de Cristian y empieza a sentirse impotente y atrapada en la relación.
De acuerdo al portal montevideo.com.uy, la investigación publicada en el Journal of Women's Health sostiene que el abuso emocional y sexual, así como los daños que sufre Anastasia Steele, el personaje principal de la trama, es el centro de la novela. Si bien la salud de un 25% de estas mujeres es perpetrada por sus parejas, es la aceptación de este tipo de violencia a través de novelas y filmes la que hace que se normalice la noción del abuso, indica el estudio.
¿Cómo realizaron el análisis de Cincuenta sombras?
La responsable del equipo de trabajo, Ana Bonomi, junto a sus colaboradoras Lauren E. Altenburger y Nicole L. Walton, leyó la novela que se cataloga como “romántica” y “erótica” y escribió síntesis de los capítulos para poder reconocer las temáticas tratadas en la obra.
Partieron de la definición de “violencia de pareja íntima” utilizada por los Centros para Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU que la define en base al abuso emocional a través de la intimidación y las amenazas verbales, el aislamiento, la vigilancia y humillación. Por su parte, definen la “violencia sexual” como toda actividad obligada, contra la voluntad de la persona, a partir del uso de alcohol, drogas o intimidación.
Comparando esta definición con las situaciones que se producen a lo largo de la novela, los investigadores descubrieron actitudes y reacciones en común entre la protagonista y las mujeres que han sufrido instancias reales de violencia. De acuerdo con Bonomi, la historia ronda estándares peligrosos de abuso y la disfraza como “romántica” o “erótica”. Explica que no era necesario incluir el abuso para lograr erotismo.
El proceso de pérdida de la identidad, de modificar el comportamiento para adaptarse a la personalidad dominante y la sensación de amenaza constante que siente la protagonista son todas actitudes típicas de quien sufre violencia.
Su comportamiento empieza a adaptarse a los patrones de abuso de Cristian y empieza a sentirse impotente y atrapada en la relación.
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