Ángela Barrios: "La Universidad Autónoma se distingue por las buenas relaciones de la comunidad universitaria y por la proximidad y cercanía en el trato con los estudiantes"

P. La UAM tiene 29.000 estudiantes matriculados ¿Cómo influye esta cifra en el perfil y la gestión de la universidad?

R. La Universidad Autónoma destaca por su calidad docente e investigadora, un área por la que somos muy conocidos. Cuando se comparan realidades universitarias, se puede apreciar que la UAM se distingue por las buenas relaciones de la comunidad universitaria y por la proximidad y cercanía en el trato con los estudiantes. Somos una universidad, pese a la crisis, muy comprometida con la calidad y la excelencia –ahora con la subida de tasas más que nunca- y que trata de cuidar a sus estudiantes en todas las fases de su formación. Este vicerrectorado pretende mirar con ojos de estudiante, ya que a veces se nos olvida que el objetivo principal de la institución son las alumnas y los alumnos.

P. En los últimos años, ¿cuáles son las carreras más demandas?

R. Tenemos la suerte de contar con titulaciones de mucho prestigio en la Comunidad de Madrid. A día de hoy no notamos que haya caídas importantes en ninguna titulación. Es cierto que la demanda en Ciencias de la Salud es bastante elevada, pero también hay otras titulaciones que van ocupando espacios importantes, en algunas ha aumentado su demanda, como por ejemplo Física y Matemáticas. Eso sin olvidar nuestros posgrados. La crisis está marcando mucho las decisiones de los estudiantes; puesto que sus expectativas son más bajas, intentan buscar grados que les permitan acceder a los posgrados profesionalizantes.

P. ¿Qué interesa más, los estudios vinculados a las ciencias o los relacionados con las humanidades?

R. El mundo académico y profesional se está ajustando y reorganizando. En este momento no hay nada garantizado, de modo que hay carreras como Traducción e Interpretación –que pertenece a la rama de las Humanidades- y que en la actualidad está muy solicitada. Lo que ocurre es que se están especializando los títulos, y las expectativas entre los estudiantes se están igualando a la baja. En este sentido, la Universidad se tiene que adaptar a las nuevas reglas y en esta nueva etapa el Equipo de Gobierno tiene claro que hay que impulsar las relaciones de la Universidad y el mundo profesional. Para ello, se va a apostar por el proyecto AlumniUAM que busca potenciar y promover la inserción laboral y el intercambio entre profesionales y estudiantes de nuevo ingreso o de último curso.

P. ¿Qué es exactamente el proyecto AlumniUAM?

R. Es un proyecto que va a coordinar el equipo del Vicerrectorado de Relaciones Institucionales pero en el que estamos otros implicados. Debemos pensar en la Universidad como un espacio con una puerta giratoria que nunca se cierra y a la que el estudiante puede volver cuando lo necesite y devolver a la universidad parte de su conocimiento. En cuanto a la labor del Vicerrectorado de Estudiantes, estamos iniciando los contactos entre los estudiantes de los últimos cursos con profesionales ya situados para crear redes. Estamos muy ilusionados, es un proyecto de envergadura y pensamos que es lo que toca en este momento.

P. ¿Qué medidas está tomando la Autónoma ante la subida de tasas universitarias?

R. La subida de tasas siempre es negativa para los estudiantes, sobre todo teniendo en cuenta la importancia de la subida y el momento en el que se hizo. El estudiante tiene que saber que la Universidad no es la que fija las tasas, sino que es la Comunidad de Madrid. La UAM, por acuerdo del Claustro, decidió ante esta medida aumentar la cantidad del Fondo Social de Estudiantes, un fondo destinado a pagar las matriculas de aquellos estudiantes que no pueden hacerlo. En el último curso, dicho fondo pasó de unos 90.000 euros a 500.000. Se han recibido más de 500 solicitudes y han resultado beneficiarios de dichas ayudas 291 estudiantes, además de un número importante de posgraduados. La Universidad va a tratar de mantener estas ayudas con una cuantía superior a la destinada en años anteriores.

P. ¿Qué novedades hay para el próximo curso?

R. Tenemos un grado nuevo –Filosofía, Política y Economía- que se imparte entre tres universidades: Autónoma de Madrid, Carlos III y Pompeu Fabra. Los programas de movilidad continúan pese a la crisis. En este momento existe un interés notable por la movilidad y lo que estamos notando es una mayor demanda de información acerca de lo que hay y de cómo acceder a esos programas.
 
P. ¿Cuál es la postura de la Universidad con respecto a la nueva ley y al cambio en la nota de acceso a las becas?

R. Nos llama la atención que es un proyecto sin un diálogo previo y que complica el acceso a la Universidad; tendría, a mi modo de ver, un efecto disuasorio. El estudiante, cuando lee esta convocatoria, puede apreciar que es muy difícil calcular la cuantía de lo que llegaría a percibir en el caso de obtener la beca. Si se aprobara tal cual, va a perjudicar a la Universidad; no solamente va a haber menos becados sino que las cuantías van a ser menores. El Consejo de Universidades ha manifestado su desacuerdo con el proyecto y ha solicitado que se cuente con la institución para modificarlo.

P. ¿Se encuentra saturado el mercado español de titulados universitarios?

R. Sería estupendo un país saturado de titulados donde todo el mundo pudiera participar activamente en todos los aspectos político-sociales. Podría parecer que un título ya no tiene sentido y que lo importante es acceder al mercado laboral y al puesto que éste permita. Sin embargo, lo que se está notando en las universidades es que el mundo profesional es más competitivo y el estudiante quiere prepararse mejor.

P. ¿Están los estudiantes suficientemente representados en los órganos de gobierno de la Universidad?

R. La Universidad tiene que actuar para promover esa participación. No creo que sea una cuestión de cantidad sino de canales disponibles y de información acerca de esos canales. Es cierto que la Universidad necesita un plan de participación, un objetivo que nos hemos propuesto a corto y medio plazo: promover el contacto entre los representantes de los estudiantes y los representantes en Junta y en órganos de Gobierno para que la información fluya y porque además es útil para el seguimiento de la calidad de las titulaciones. Creo que hay que dar un empuje a la participación y vamos en esa línea. Existen canales pero hay que informar acerca de ellos y agilizar y diversificar la forma de comunicarse.