El hallazgo de un nuevo método de regulación de la sensación de frío fue
descubierto por expertos de la Universidad de Cambridge junto a un
científico del Instituto de Neurociencias de Alicante.
Un nuevo mecanismo que regula la sensación de frío en las personas acaba de ser descubierto por investigadores de la Universidad de Cambridge.
Esto permitiría estudiar el posible desarrollo de un fármaco que permita imitar dicha sensación para lograr un efecto analgésico.
Los expertos partieron de la base en su estudio de que el frío moderado inhibe el dolor y se centraron en la conocida como proteína TRPM8, que permite el paso de corriente eléctrica a través de la membrana de las células.
Sucede que otra proteína llamada Gq, interactúa con la anterior durante la inflamación y produce una reacción donde la sensación de frío queda desactivada. Lo que sugieren los investigadores es que revertir el proceso "podría ser una útil estrategia analgésica", lo que abre la puerta a la opción de "manipular clínicamente las vías nerviosas del frío simplemente interfiriendo con la interacción entre la proteína Gq y el canal TRPM8".
Creado en 1990 en el campus de Sant Joan d'Alacant, junto al hospital universitario de San Juan, el Neurociencias,
dependiente de la UMH y el CSIC, constituye el mayor centro español dedicado monográficamente al estudio del sistema nervioso y del cerebro.