El comisario de la muestra, Mario Virgilio Montañez, explicó que "las primeras obras son de cuando Picasso tenía 24 años, en el tránsito de la época azul a la época rosa, y era normal que hubiera una presencia clásica teniendo en cuenta su formación academicista”. Y finaliza con una visión del clasicismo aplicado a las dos últimas compañeras de Pablo Picasso: Françoise Gilot y Jacqueline Roque.
En su recorrido pueden observarse algunas de sus más maravillosas creaciones como ser los aguafuertes que el artista creó para ilustras las "Metamorfosis" de Ovidio, del que se ha llegado a afirmar "que es uno de los libros más bellos de la historia", agregó Montañez.
En total, estarán divididas en nueve áreas temáticas "Bajo el signo de Apolo", "Las 'Metamorfosis' de Ovidio", "Nuda veritas", "La rebelión cubista", "Ecos de Cranach", "Atracción y deseo", "Harén y gineceo", "La vida desbordada" y "Musas".
La exposición parte de una declaración de Picasso acerca de la deuda que mantenía con el arte clásico y el deber, pero también las dificultades, de alejarse de ese clasicismo.