El “homeschooling”, o educación desde casa, es una modalidad de enseñanza casi desconocida en España, pero cada vez más popular en países como Estados Unidos, manera en la más del 3% de los estudiantes aprenden. Además, vecinos como Portugal, Francia, Irlanda e Inglaterra ya han incorporado el modelo como válido en su legislatura. En España el caso aún no ha sido abordado, y actualmente se encuentra en un vacío legal.
En los últimos 10 años, la presencia de este modelo de educación se ha consolidado gracias a algunas claras ventajas que presenta tanto para los padres como para los alumnos. Asimismo, en países como Estados Unidos o Canadá, las universidades ya han comenzado a abrir plazas para estudiantes escolarizados en sus casas.
Homeschooling en los hogares españoles
Este concepto es aún muy nuevo en España, al punto que muchos suelen confundir la terminología con el abandono escolar o familiar. Los hogares que hoy en día incorporan esta modalidad pretenden hacerlo con normalidad y apertura. Además, los expertos vaticinan un aumento de esta modalidad.
El principal objetivo de este modelo es que los padres puedan acerca a sus hijos una educación en el ámbito familiar. Además, este método permite respetar los ritmos de estudio de cada niño y potenciar las capacidades individuales. Funciona de manera similar a la educación escolar, con un currículo, pero se realiza de manera personalizada, atendiendo al caso particular de cada niño, a sus intereses y dificultades.
Principales ventajas y desventajas del homeschooling
La modalidad se ha tornado popular en otros países precisamente porque presenta interesantes ventajas, no solo para los niños sino también para sus padres:
1. Promueve la enseñanza personalizada
Los padres pueden atender a las necesidades de cada uno de sus hijos de forma personalizada, valorar el proceso de aprendizaje y reforzar el conocimiento de aquellas materias que presenten mayores dificultades para el alumno.
2. Se educa en base al ritmo de cada alumno
En las clases numerosas suele suceder que muchos no aprenden porque tienen un proceso de aprendizaje más lento, o menos ritmo y requieren de mayor atención que el docente en general no puede dar.
3. Un currículo adaptado a las necesidades del niño
Los padres pueden adaptar los programas y ejercicios a su hijo y mejorar su rendimiento, motivación y éxito académico.
Pese a las ventajas, como todo siempre existen problemas:
1. El homeschooling demanda mucho esfuerzo de los padres
Precisamente porque deben atender al currículo, las necesidades del niño, las lecciones del día, los ejercicios, las calificaciones…los padres necesitan dedicarse mucho a la enseñanza de sus hijos.
2. Los niños tienen más dificultades para hacer amigos
Precisamente por estar acostumbrados a hablar con sus familiares, a veces carecen de las habilidades necesarias para generar nuevos vínculos, por lo que es importante realizar actividades extracurriculares.
3. El homeschooling puede ser aburrido para los niños
Por tener que compartir su tiempo con los padres, muchos niños se sienten menos motivados y se aburren.