Los materiales educativos de libre acceso no serán producidos por las universidades hasta 2022
Pese a que son cada vez más las organizaciones y revistas que producen contenidos de acceso libre o gratuito, el profesorado universitario no pondrá en práctica este hábito completamente hasta 2022. Así lo advierte el nuevo informe de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), "La Universidad y las TIC".
Para promover la transparencia y el acceso libre a la información, muchas instituciones y revistas científicas han comenzado a publicar sus contenidos sin restricciones. Sin embargo, esta práctica tan cotidiana ya para muchos, es poco corriente en las universidades, que publican los materiales con restricciones de acceso, dificultando la tarea de los estudiantes, y por tanto limitando el acceso al conocimiento. De acuerdo al nuevo informe "La Universidad y las TIC" de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), esta realidad no se instaurará en la comunidad docente hasta 2022.
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El cambio tecnológico a 2 velocidades
A través del método Delphi, expertos españoles y latinoamericanos exploraron "cómo evolucionará la universidad en los próximos diez años debido al impacto de las tecnologías de la información y la comunicación", explicó el vicerrector de Investigación y Tecnología de la Universidad, catedrático UNESCO en e-learning y coautor del trabajo, Daniel Burgos.
El documento revela que hay 2 velocidades de incorporación de las tecnologías a las universidades españolas y latinoamericanas: la primera, a través de acciones y estrategias que integran las tecnologías digitales sin generar cambios radicales en la manera de trabajar de las instituciones, que muchas universidades ya han implementado.
La segunda velocidad se refiere a los cambios que implican una mayor profundida tecnológica. Éstos podrán producirse a medio o largo plazo, o directamente nunca se llevarán a cabo. Así, el coautor del estudio y profesor-investigador de UNIR, José Manuel Robles, sostiene que “la incorporación de las TIC a la educación superior será inminente, siempre y cuando no implique una transformación profunda de los procesos establecidos”.
¿Cuáles son las barreras en la aplicación de las TICs en la educación superior?
El informe analiza cuáles son los cambios que se podrían generar en los 5 sectores del sistema de educación superior. Éstos son la universidad, el profesorado, los estudiantes, el personal de administración y servicios, y la sociedad y esfera política. Asimismo, explica que hay barreras que las universidades deberán evitar para lograr una mayor profundización tecnológica.
Burgos sostiene que “mientras los obstáculos para los procesos de innovación más sencillos e inmediatos son coyunturales (recursos económicos), la innovación más profunda se encuentra con barreras estructurales (culturales y políticas)”. Son estas barreras las que requieren de un cambio de actitud de las universidades, y esto lleva a que hoy los profesores no puedan generar sus propios materiales educativos y hacerlos accesibles a todos, a pesar que la posibilidad a nivel tecnológico ya existe.
Estas prácticas son claves para el proceso, pero no son prioritarias para las universidades, y que las resistencias a la tecnología generan un impacto negativo en la educación superior, advierte el estudio.
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