PISA: cómo Polonia se recuperó
De acuerdo a las más recientes cifras del informe PISA 2012, la educación de Polonia ha mejorado notablemente. Conoce el secreto a su "milagro educativo"
Recientemente la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) publicó los resultados de la última edición del informe PISA (Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes) donde se analiza la capacidad de los jóvenes de 15 años de adaptar sus conocimientos a situaciones cotidianas. El estudio tomó datos de más de 28 millones de jóvenes de 65 países miembros y asociados a la OCDE. De acuerdo con ello, Polonia ha mejorado significativamente en todos las disciplinas y esto tiene una explicación.
Los resultados polacos se encuentran por encima de la media de la OCDE en las 3 disciplinas (matemáticas, lectura y ciencias), presentando grandes mejoras con respecto a 2003: en matemáticas ha pasado de 490 puntos en 2003 a 518 en 2012 (14º puesto de la OCDE), en lectura de 479 puntos en 2000 a 518 en la última evaluación (10ª posición) y en ciencias ha alcanzado 9º lugar, con 526 frente a los 498 del año 2006.
¿A qué se deben las mejoras en los resultados de PISA en Polonia?
El pasado martes el primer ministro polaco Donald Tusk alababa a los jóvenes de su país designándolos como unos de los más talentosos del continente y del mundo. Y todo esto con la mitad del gasto por alumno a lo que gastan como media los países integrantes de la OCDE.
El éxito es sencillo: gracias a sus 2 grandes reformas educativas en 1999 y 2009, donde se implementaron, entre otras medidas, la instauración de “reválidas”, una mayor cuota de autonomía de los centros escolares y un programa de incentivos para docentes.
En 1989 llegó el fin de la dictadura, el gobierno democrático pretendió remover la carga ideológica que se había insertado desde los tiempos de Stalin, así como elevar el nivel de la educación en general y reformar completamente la estructura. Se responsabilizó a las autoridades locales en materia de educación, se reorganizó la red escolar, se introdujo un nuevo sistema de exámenes, cambió las formas de financiación y promovió nuevos incentivos a los docentes.
El cambio fundamental se produjo en cuanto a los años de instrucción: se pasa de una estructura de 8 años de Primaria, 4 o 5 años de Secundaria o 3 de Formación Profesional, a 6 años de Primaria, 3 de Secundaria o 3 de Formación Profesional.
Mayor autonomía y un sistema de reválidas
Además proveyó a los centros de mayor autonomía para crear sus programas de contenidos, compaginando el estudio con el desarrollo de habilidades y actitudes. Ya no seguían instrucciones de autoridades, sino que los docentes podían tener su propio estilo de enseñanza, indica el informe.
Además pone un sistema de recogida de información y regulación para que al final de cada etapa se realicen evaluaciones nacionales que el en nuestro país se conocen como “reválidas”, y las que se realizan al final de Secundaria sirven para acceder a la universidad.
Así, las evaluaciones nacionales estandarizadas permitieron al estudiante controlar sus resultados e incentivó al cuerpo docente.
Incentivos a docentes y cambio en las asignaturas
La reforma de 1999 ofrece a los docentes un nuevo sistema de desarrollo profesional y evaluación de su trabajo y métodos, que aumenta los requisitos pero con mejores escalas de remuneración.
Asimismo, con la ampliación de la reforma en 2009, se cambia el currículo básico de competencias y habilidades, centrándose en la experimentación y la investigación, en la resolución de problemas, la colaboración y el razonamiento, así como una modificación en la formación profesional.
Los resultados polacos se encuentran por encima de la media de la OCDE en las 3 disciplinas (matemáticas, lectura y ciencias), presentando grandes mejoras con respecto a 2003: en matemáticas ha pasado de 490 puntos en 2003 a 518 en 2012 (14º puesto de la OCDE), en lectura de 479 puntos en 2000 a 518 en la última evaluación (10ª posición) y en ciencias ha alcanzado 9º lugar, con 526 frente a los 498 del año 2006.
¿A qué se deben las mejoras en los resultados de PISA en Polonia?
El pasado martes el primer ministro polaco Donald Tusk alababa a los jóvenes de su país designándolos como unos de los más talentosos del continente y del mundo. Y todo esto con la mitad del gasto por alumno a lo que gastan como media los países integrantes de la OCDE.El éxito es sencillo: gracias a sus 2 grandes reformas educativas en 1999 y 2009, donde se implementaron, entre otras medidas, la instauración de “reválidas”, una mayor cuota de autonomía de los centros escolares y un programa de incentivos para docentes.
En 1989 llegó el fin de la dictadura, el gobierno democrático pretendió remover la carga ideológica que se había insertado desde los tiempos de Stalin, así como elevar el nivel de la educación en general y reformar completamente la estructura. Se responsabilizó a las autoridades locales en materia de educación, se reorganizó la red escolar, se introdujo un nuevo sistema de exámenes, cambió las formas de financiación y promovió nuevos incentivos a los docentes.
El cambio fundamental se produjo en cuanto a los años de instrucción: se pasa de una estructura de 8 años de Primaria, 4 o 5 años de Secundaria o 3 de Formación Profesional, a 6 años de Primaria, 3 de Secundaria o 3 de Formación Profesional.
Mayor autonomía y un sistema de reválidas
Además proveyó a los centros de mayor autonomía para crear sus programas de contenidos, compaginando el estudio con el desarrollo de habilidades y actitudes. Ya no seguían instrucciones de autoridades, sino que los docentes podían tener su propio estilo de enseñanza, indica el informe. Además pone un sistema de recogida de información y regulación para que al final de cada etapa se realicen evaluaciones nacionales que el en nuestro país se conocen como “reválidas”, y las que se realizan al final de Secundaria sirven para acceder a la universidad.
Así, las evaluaciones nacionales estandarizadas permitieron al estudiante controlar sus resultados e incentivó al cuerpo docente.
Incentivos a docentes y cambio en las asignaturas
La reforma de 1999 ofrece a los docentes un nuevo sistema de desarrollo profesional y evaluación de su trabajo y métodos, que aumenta los requisitos pero con mejores escalas de remuneración.
Asimismo, con la ampliación de la reforma en 2009, se cambia el currículo básico de competencias y habilidades, centrándose en la experimentación y la investigación, en la resolución de problemas, la colaboración y el razonamiento, así como una modificación en la formación profesional.
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